miércoles, 31 de agosto de 2016

El dolor de recordar



Creo que la clave no está en intentar olvidar a esa persona que amamos profundamente en nuestro pasado. Precisamente porque la amamos, llegó tan profundo que tratar de sacarla es tarea imposible. Por eso pienso que ahí es dónde se nos escapa la energía, pues lleva muchísima tratar de olvidar. Creo que la clave no está en tratar de olvidar a esa persona, sino en aprender a vivir con su recuerdo. No va dolor siempre, no va a formarse un nudo en tu estómago cada vez que lo recuerdes. Pero con el tiempo, con la paz adecuada, con la conciencia adecuada de que todo pasa, seguirás recordando, seguirás pensando que estará haciendo ahora, sí pensará en mi. Pero de forma distinta, sólo como ese recuerdo que te acompaña. Nunca olvides. Persiste, continúa, integra, pero no olvides tu historia o estarás condenado a repetirla.  

jueves, 17 de marzo de 2016

La lucha sigue



Solamente sabia una cosa con seguridad: que no podía rendirme. En el momento en el que lo hiciese estaría perdida. Caer en la desesperanza suponía caer también en la desidia. La marea subiría y acabaría con todo.

Así que una forma apta y lógica de supervivencia es continuar la lucha aunque una tras otra se pierdan las batallas. En Psicología existe un fenómeno conocido como "Indefensión Aprendida". Esto supone que, el sujeto, a base de intentarlo todo recibiendo siempre la misma respuesta, simplemente deja de intentarlo. Se deja caer en la orilla y arrastrar por la marea. 
¿Por qué es tan grave caer en este estado de sumisión vital? Porque la vida, y por ende todo ser viviente, estamos sujetos al cambio. Nada permanece, nada es inmutable. Por lo que lo que nos funcionó en el pasado puede no funcionar en el presente y viceversa. Por lo que seguir intentándolo forma parte del juego. Si ahora no lo logras cambia de técnica. Si ahora no lo logras, espera, pero permanece siempre en la línea de salida.


Revisar cada día cuáles son nuestras opciones es una buena forma de continuar. Si no se puede seguir por una vía continuar por otra. Las posibilidades están ahí, aunque muchas veces no podamos verlas. Estar motivado supone estar aleta. Tener la energía mental y física que se necesita para hacer las cosas, por muy sencillas que parezcan a simple vista. Estar motivado supone ante todo, querer intentarlo. Las posibilidades de fracasar siempre van a estar ahí, acechando. Thomas Edison no logró crear la bombilla con un solo intento. El arma de la perseverancia es tan fuerte que nos puede permitir lograr lo impensable. Tener miles de respuestas negativas pueden ayudarnos a aprender, a tener experiencia, a lograr la sabiduría. Y sólo necesitamos que una sea positiva. 

Así que, ¿merece la pena vivir luchando? O por el contrario, ¿ Merece la pena dejarse arrastrar por la caprichosa marea? 

martes, 23 de febrero de 2016

La Capacidad de Automotivarnos

Siento, luego existo. 


¿Hay algo mejor que ser capaz de motivarse a uno mismo?

Aunque pueda parecer algo lógico y sencillo, a veces no pensamos que la falta de motivación es nuestra responsabilidad y que siempre va a tener que ver con como percibimos la realidad que nos rodea. A veces pensamos que necesitamos la palmadita en la espalda para saber que estamos haciendo las cosas bien y que nos estamos esforzando lo suficiente. Pero, ¿y si no la recibimos? ¿significa que valemos menos?

No todos los padres o ambientes familiares, crían a sus hijos de la misma manera. Hay criadores que utilizan más el refuerzo positivo, otros el castigo y otros directamente no utilizan nada (es lo que conocemos como negligencia). Es injusto pensar que muchas rasgos de nuestra personalidad quedan marcados por como nos educaron y nos motivaron nuestros padres. Por como nos dijeron o no nuestros profesores que valíamos o no valíamos para lo estudios. Por como nuestros compañeros de clase nos dijeron que éramos o no éramos guapos. ¿Hasta que punto debería ser esto determinante de las personas que somos ahora? ¿Qué tus padres no estén orgullosos de ti supone que tú no tengas que estarlo de ti mismo?

Otra cuestión tiene que ver con las expectativas que tiene cada uno. No hay nada comparable a descubrir un día que nadie está aquí para cumplir con las expectativas de nadie. Eso puede suponer una liberación. Por ejemplo, el hecho de que dejemos de luchar por que nuestros padres estén orgullosos de nosotros. Ese orgullo es completamente subjetivo. Es subjetivo porque cada uno tiene sus valores, y nuestros padres pueden tener unos valores que poco tengo tengan que ver con los nuestros. Puede que el orgullo de nuestros padres sea que nos casemos y tengamos hijos y un buen trabajo. Pero, ¿y si no es el nuestro? ¿y si por lo que sea nunca lo logramos?
Vivimos en sociedad. Es evidente. Es cotejado una y otra vez por estudios científicos, el hecho de que nos necesitamos unos a otros para sobrevivir, que un ser humano sano y "normal" se relaciona con su entorno de forma sana y "normal". Pero ello no implica dejar que nos invadan. Con ello quiero decir, que no debemos dejar que la opinion de otros y que las expectativas de otros nos importen y nos afecten más que las nuestras. Que YO soy la persona más importante para MI. Que ello no implica egoísmo ni individualismo. Significa que si yo no tengo una buena relación conmigo, sino respeto mis propias necesidades y mis propias expectativas, no voy a poder tener una relación con el medio sana y "normal". Que si y no soy capaz de motivarme a mi mismo, ¿quién me va a motivar? ¿Las expectativas de mis padres? ¿La sociedad de consumo? ¿Un día una cosa y un día otra?

¿Nos debe importar que otros sean felices con mis logros? Por supuesto. Pero tener en cuenta los sueños de nuestros padres respecto a nuestra vida y lo que querrían que fuésemos, no es determinante. No es la verdad absoluta, el camino correcto o cómo deberían ser las cosas.

Tengámoslo claro: las expectativas de los otros son las suyas, no las nuestras.